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El tráfico web es algo así como una especie de gallina de los huevos de oro. Una vez lo logras generar, tu proyecto online crece de forma exponencial. Pero, dentro de este, ya que existen diversos tipos, es especialmente interesante el tráfico SEO. Veamos por qué.
¿Qué es el tráfico web?
El tráfico web es el número de visitantes y de vistas que cada uno de ellos navega cuando alguien aterriza en tu página web, en tu blog, en tu landing page, en tu tienda online, etc.
Se puede medir la efectividad de una página o una publicación dependiendo de la plataforma. Mientras Google lo hace por los clics que el usuario realiza en una web, Facebook varía su práctica, midiendo tanto el alcance como la diversidad de interacciones que otros usuarios realizan de un contenido, lo que pueden significar clics en enlaces o imágenes, comentarios, Me Gusta, etc.
Sea como fuere, el objetivo de todo proyecto es llegar tan lejos como pueda y, sea cual sea la plataforma, lo ideal es lograr tráfico web y, de hecho, si puede ser tráfico SEO, tanto mejor, ya que se suele considerar como el más fiable, duradero y de calidad.
Qué es el SEO
Entendemos como SEO las siglas del término inglés Search Engine Optimization. Es decir, la optimización para los motores de búsqueda tipo Google.
En el caso del tráfico SEO, haremos referencia a esa cantidad de visitantes que llegan a nuestra web a través de la optimización para motores de búsqueda.
6 Tipos de tráfico web que debes conocer
Encontramos muy diversos tipos de tráfico web que se pueden generar. Básicamente destacan seis, que describimos brevemente ahora para desarrollarlos con mayor profusión a continuación:
- Tráfico directo: es el tráfico que se genera a través de usuarios que conocen tu empresa o proyecto y escriben directamente el nombre y dirección del sitio web en la barra de búsqueda. Puede ser recomendado o cliente frecuente, por ejemplo.
- Tráfico de pago: este tráfico web se genera a través de plataformas o herramientas que, usando técnicas como el PPC (Pay Per Click), generan visitas que tú pagarás según el sistema de pujas. Los más famosos son Google Ads, Amazon PPC, Yahoo Gemini, etc.
- Tráfico viral: es tráfico que se genera porque un contenido se comparte muchas veces en redes sociales como Twitter o Facebook o apps de mensajería instantánea como WhatsApp o Telegram. El usuario siente interés y curiosidad, clica y envía a sus contactos, amigos, etc.
- Tráfico SEO u orgánico: es el tráfico que se genera mediante las búsquedas en motores como el de Google. Se logra a través del contenido, el uso de palabras clave y otras técnicas llamadas SEO, encontrando tu marca de forma natural.
- Tráfico display: se trata de un tipo de tráfico de pago que se genera a través de los anuncios de Google Display. Esta técnica, conocida como SEM, que significa Search Engine Marketing, implica pagar por cada clic que se logra, pero en este caso se hace únicamente por medio de la herramienta Google Ads. No cuentan otras de motores de búsqueda diferentes o compañías online especializadas en ello.
- Tráfico referencial: recibe el nombre de tráfico referido o tráfico referral. Se trata de las visitas que llegan a tu site a través de enlaces incluidos en otras webs, ya sea por una colaboración estipulada, por el aporte de contenido de calidad, etc.
Por qué importa el tipo de tráfico que se consigue
Conocer estos diversos tipos de tráfico, tanto SEO como otros, nos ayuda a pensar y establecer estrategias de marketing que permitan maximizar resultados trabajando en todos los frentes, desde las redes sociales hasta las colaboraciones con otros medios.
Conoces a tu audiencia
El tráfico SEO, el referencial y los demás te permiten saber desde dónde viene tu audiencia, cómo te encuentra, qué temáticas le interesa, etc. Así podrás reforzar aquellas secciones de tu web que mejor funcionen y mejorar las que no estén a la altura deseada.
Permite centrar esfuerzos
El conocimiento es poder. Saber qué funciona mejor en tu proyecto te permite centrarte en aquello que de forma característica permite que tu empresa online crezca.
Personalización
A sabiendas del tipo de tráfico que mejor funciona en tu web, puedes personalizar el contenido para ofrecer valor añadido a tus visitantes y optimizar todas las etapas de un embudo de compra, por ejemplo.
Reducción de tasa de rebote
Otro detalle a considerar. El tráfico SEO que llegue a tu web, o desde cualquier otra fuente si es el caso, puede elevar la tasa de rebote, lo que provoca que en realidad sea contraproducente.
Si un usuario accede a tu web y automáticamente sale y se marcha, el algoritmo de Google puede interpretar que tu site no ofrece contenido de calidad, no aporta valor añadido y no merece la pena. O sea, el internauta no encuentra las respuestas que busca.
Necesitas dar con tráfico que calidad que navegue por tu web. Por eso, intenta tener una tasa de rebote por debajo del 70%. Google sabe que todo depende del género, del tipo de web, de lo específica que sea la búsqueda, etc. No puedes evitar el rebote, pero sí minimizar sus efectos.
Tipos de tráfico web
Explicamos con mayor profundidad el tipo de tráfico web que se puede conseguir hoy en día en internet. Anota.
Proviene de las redes sociales. Cada proyecto tiene redes específicas donde puede generar muchos clics hacia la web. Todo dependerá de la capacidad del social media manager.
Un buen community manager o una campaña bien segmentada pueden generar mucho tráfico hacia la web. Dependerá también del presupuesto, obviamente, pero, sobre todo para una tienda online, puede ser muy eficiente según la red, pues no funciona igual Facebook que Twitter, por ejemplo.
Tráfico directo
Este tráfico se produce cuando un usuario teclea directamente la url para acceder a una página. Suele incluir clientes, colaboradores e internautas recurrentes. Ahora bien, también se puede producir por accesos de la competencia, de empleados, etc.
Es interesante revisar el origen geográfico de este tipo de tráfico web. Si la empresa es de ámbito local, por ejemplo, puede no ser un buen dato que se conecten personas en otros países, pues no contribuyen al negocio.
Tráfico SEO
Llamado tráfico SEO, tráfico orgánico o tráfico de búsqueda orgánica, es el más codiciado. Se produce cuanto tu web tiene una posición de privilegio para una palabra clave concreta en un motor de búsqueda online, principalmente Google, aunque también puede ser interesante estar arriba en otros como Bing o Yahoo.
Para que sea significativo, hay que lograr estar entre el Top 10 de búsquedas y, sobre todo, en el Top 3, que es cuando más crecen las visitas y vistas.
Para alcanzar cotas estimables hay que realizar un gran esfuerzo desde un punto de vista SEO. A ello se llega por medio de la generación de contenido, por los tiempos de carga de la página y la experiencia de usuario, por la calidad de los enlaces, por la autoridad del site, por el correcto uso de keywords de valor, por la confianza que genere, etc.
Recuerda, no siempre tienes que usar las mejores palabras clave. Con que sean aquellas que proporcionan el tráfico necesario para tu negocio de tu web ya puede bastar.
Tráfico de pago
También conocido como tráfico SEM, se produce cuando se invierte en campañas de pago por clic o PPC. La herramienta más famosa y célebre es Google Ads y funciona en base a pujas.
Tú eliges las keywords por las que querrás pujar. Luego, creas los anuncios con los enlaces hacia los que quieres dirigir tráfico y entras en una especie de concurso en el que el algoritmo decidirá, según hora, lugar, segmentación y presupuesto, qué anuncios se muestran antes o después. En este caso, vas a aparecer en búsquedas de Google en los primeros puestos de los primeros resultados.
Tráfico display
Este tipo de tráfico también es ofrecido por Google a través de su herramienta Google Ads y sirve para crear campañas de display, de remarketing o para aparecer en las páginas web de los partners de la compañía, es decir, en huecos que muchos blogs y sites dedican a este tipo de publicidad.
Tráfico referido
También llamado tráfico referral, se trata de aquel que proviene de otra web que ha enlazado hacia la tuya. Es decir, si colaboras con otros sites y añaden enlaces a tu página, o si alguien te ha nombrado en su proyecto online y ha puesto un enlace externo hacia tu proyecto, recibirás tráfico interesante, ya que suele ser porque tu contenido aporta valor al internauta.
Este tipo de tráfico aporta doble valor. Por un lado, atrae a visitantes, por otro, permite que crezca la autoridad, la notoriedad y la confianza de tu web, lo que ayuda a Google y otros motores de búsqueda a distinguir tu web como referente, por lo que, a la postre, influye en tu posición orgánica y mejorará tus posiciones para atraer también más tráfico SEO.
Pero ojo, evita que provenga de webs e índices tóxicos. En ese caso es muy contraproducente y puedes ser penalizado.
Técnicas para atraer tráfico SEO
Si deseas atraer tráfico SEO de calidad a tu web, anota estas técnicas de valor:
- Usa keywords longtail.
- Crea contenido de calidad que aporte valor añadido a la necesidad del visitante.
- Crea una gran red de linkbuilding con backlinks de calidad.
- Añade un blog donde trabajar keywords longtail y crear contenidos de interés para el internauta.
- Crea alianzas estratégicas con webs con autoridad.
- Usa el guest posting y el guest blogging.
Ahora que conoces los diversos tipos de tráfico SEO y tráfico web, implementa estrategias globales que te permitan crecer en todos los sentidos, pues cada clic de calidad que llegue a tu site es un verdadero tesoro.
