Es el acrónimo de «Cost Per Lead» o Coste Por Cliente Potencial en español. Se refiere al costo que se incurre para obtener un cliente potencial a través de una campaña publicitaria o de marketing.
Un cliente potencial es una persona que ha demostrado interés en un producto o servicio y ha proporcionado su información de contacto (como su nombre y dirección de correo electrónico) para recibir más información.
Para calcular el CPL, se puede utilizar la siguiente fórmula:
CPL = costo de la campaña / número de clientes potenciales generados
Por ejemplo, si se ha gastado $500 en una campaña y se han generado 50 clientes potenciales, el CPL sería de $10 ((500 dólares / 50 clientes potenciales) = 10 dólares).
Existen varias formas de optimizar el CPL:
- Utilizar palabras clave relevantes: utilizar palabras clave relevantes en las campañas publicitarias o de marketing puede ayudar a aumentar la efectividad de la campaña y a reducir el CPL, ya que se atraerá a personas que estén realmente interesadas en el producto o servicio.
- Utilizar anuncios segmentados: utilizar anuncios segmentados que se dirijan a un público específico puede ayudar a aumentar la efectividad de la campaña y a reducir el CPL, ya que se atraerá a personas que estén más interesadas en el producto o servicio.
- Hacer pruebas A/B: hacer pruebas A/B consiste en comparar dos versiones de un anuncio (la versión «A» y la versión «B») para determinar cuál produce un CPL más bajo. Esto se puede hacer cambiando diferentes elementos, como el texto del anuncio o la imagen.
- Optimizar el proceso de conversión: optimizar el proceso de conversión (es decir, el proceso por el cual un cliente potencial se convierte en un cliente real) puede ayudar a aumentar la efectividad de la campaña y a reducir el CPL, ya que se aumentará la tasa de conversión de clientes potenciales a clientes reales.